La oración al Glorioso patriarca,
patrón de las causas imposibles:
Glorioso Patriarca San José,
humilde y justo, que has dado a todo cristiano, especialmente a nosotros, el
ejemplo de una vida perfecta, en el asiduo trabajo y en la admirable unión con
María y Jesús.
Asístenos en nuestra fatiga diaria, a fin de que nosotros podamos encontrar en ello el medio eficaz de glorificar al Señor, de santificarnos, de ser útiles a la sociedad en la que vivimos.
Intercede ante el Señor, para que podamos obtener la gracia de la humildad y simplicidad de corazón, amar el trabajo, ser bondadosos con aquellos que nos rodean.
Y en las inevitables dificultades de esta vida, poder soportarlas con alegría, con conciencia de nuestra misión evangélica y gran sentido de responsabilidad.
Que tengamos un espíritu disciplinado y estemos siempre en oración ya sea en épocas de prosperidad, cuando todo nos invita a disfrutar con honestidad de los frutos de nuestro trabajo, y también sea nuestro apoyo en las horas tristes, cuando el cielo parece cerrarse para nosotros, y tengamos problemas o nos falte el trabajo.
Haz que te imitemos poniendo nuestros ojos en nuestra Madre María, siempre con una dulce sonrisa y en Jesús.
Para que podamos vivir en la tierra una vida serena y santa, como la que nos espera en el cielo, por los siglos de los siglos. Amén.
SAN JOSÉ, RUEGA POR
NOSOTROS!
SAN JOSÉ, RUEGA POR
NOSOTROS!
SAN JOSÉ, RUEGA POR
NOSOTROS!
PROVIDENCIA!
PROVIDENCIA!
PROVIDENCIA!