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SANTORAL LITÚRGICO

El Niño Dios a nacido en Belén

HIMNO A SAN JOSÉ

HIMNO A SAN JOSÉ

Hoy a tus pies, ponemos nuestra vida; Hoy a tus pies, ¡Glorioso San José! Escucha nuestra oración, Y por tu intercesión, Obtendremos, la paz del corazón; En Nazaret, junto a la Virgen Santa, En Nazaret ¡Glorioso San José! Cuidaste al niño Jesús, Pues por tu gran virtud, Fuiste digno custodio de la luz. Con sencillez humilde carpintero; Con sencillez ¡Glorioso San José! Hiciste bien tu labor, obrero del Señor, Ofreciendo, trabajo y oración. Tuviste fe, en Dios y su promesa; Tuviste fe, ¡Glorioso San José! Maestro de oración, alcanzarnos el don, De escuchar, y seguir la voz de Dios:

Tercer Día Consagración a San José por 33 días

 


Oración 3

Esposo de la Madre de Dios

 

 El 19 de marzo, la Iglesia celebra la Solemnidad de San José, pero lo hacemos por la referencia a que él es “el esposo de la Santísima Virgen María”. De hecho, la vida entera de San José se define en relación a los demás. Él es el padre terrenal de Jesús, el esposo de María.

 

 La festividad celebra su fidelidad y valentía para cumplir con cada una de sus obligaciones. Mientras algunos gritan su propia virtud a los cuatro vientos en los medios sociales, San José es más que el eslogan Just Do It de Nike, él simplemente lo hace.

 

Él es la gran contraparte de las obsesiones modernas sobre la autonomía. San José es el hombre silencioso que actúa, y sus acciones están orientadas a la voluntad de Dios. Cualquiera que haya sido la visión que él tenía de su propia vida, esta se alteró de forma radical la noche en la que el ángel se le apareció en un sueño:

José, descendiente de David, no tengas reparo en convivir con María, tu esposa, pues el hijo que ha concebido es por la acción del Espíritu Santo. Y cuando dé a luz a su hijo, tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados (Mateo 1:20-21)

 

Después de esta visión se nos ha dicho que cuando José se levantó hizo lo que el ángel le pidió (Mateo 1:20-22, 24). José, que llegó a considerar la vida sin María, ahora ve que ser el esposo de María y criar a un niño que no es suyo biológicamente, es su futuro. Jesús es el Hijo de Dios y la segunda persona de la Trinidad. María es la Madre de Dios y la Madre de la Iglesia, y a José se le recuerda con relación a ellos. La grandeza de José radica en su disposición para permitir que María y Jesús fueran lo que tenían que ser. Al igual que Juan el Bautista, él se hace pequeño para que ellos puedan hacerse grandes.

 

San José, ora para que pueda imitar tu generosidad y dejar a un lado mis propias ambiciones por la voluntad de Dios… para que tú te hagas grande y yo pequeño.

 Rezar el rosario y la Letanía de San José (Clic Aquí)


Reto diario:

Examina qué tan dispuesto estás para dejar a un lado tus propios planes y ambiciones y así, como San José, busques de manera silenciosa atender primero las necesidades de los demás.


 Oración final para todos los días:

Glorioso San José, protector, modelo y guía de las familias cristianas: Te ruego protejas a la mía. Haz reinar en ella el espíritu de fe y de religión, la fidelidad a los mandamientos de Dios y de la Iglesia, la paz y la unión de los hijos, el desprendimiento de los bienes temporales y el amor a los asuntos del cielo. Dígnate velar sobre todos nuestros intereses. Ruega al Señor que bendiga nuestra casa. Otorga la paz a la familia, acierto a los hijos en la elección de estado. Concede a todos los miembros de nuestra familia y de todas las familias de la tierra, la gracia de vivir y morir en el amor de Jesús y de María. Amén.


Te suplicamos San José:

1. De los males que nos amenazan, libra nuestras familias.

2. De las discordias y roces, libra nuestras familias.

3. De las enfermedades y aflicciones, libra nuestras familias.

4. De la tristeza y desesperanzas, libra nuestras familias.

5. Del espíritu mundano, libra nuestras familias.

6. De los peligros de los falsos valores de hoy, libra nuestras familias.

7. De la ausencia y el abandono de los padres, libra nuestras familias.

8. De la inmoralidad matrimonial, libra nuestras familias.

9. De las modas y costumbres escandalosas, libra nuestras familias.

10. De la indiferencia y rebeldía religiosa, libra nuestras familias.

11. De la liviandad y la deshonestidad, libra nuestras familias.

12. De las amistades malas y peligrosas, libra nuestras familias.

13. De la falta de amor, libra nuestras familias.

14. De las incomprensiones y falta de diálogo, libra nuestras familias.

15. De la desunión y separaciones, libra nuestras familias.

16. De los abortos y descuidos de la vida, libra nuestras familias.

17. De la falta de fe, libra nuestras familias.

18. De las dificultades financieras, libra nuestras familias.

19. De la falta de pan y de casa, libra nuestras familias.

20. De las enfermedades y desgracias, libra nuestras familias.

21. De la muerte eterna, libra nuestras familias.

V. San José, ruega por nosotros! 

R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo.

 

OREMOS:

Dios de bondad y misericordia, por intercesión de San José, salva nuestras familias, haz que vivan unidas y firmes en el amor. Así como las uniste en vida por la sangre, tu bondad las reúna por la caridad en el Reino eterno. Amén.


Para terminar: 
Oremos por el Santo Padre: para que nos conduzca al triunfo del Inmaculado Corazón de María y del Sagrado Corazón de Jesús:

Padrenuestro, Avemaría y Gloria.

En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.



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