ENTRADAS POPULARES

SANTORAL LITÚRGICO

El Niño Dios a nacido en Belén

HIMNO A SAN JOSÉ

HIMNO A SAN JOSÉ

Hoy a tus pies, ponemos nuestra vida; Hoy a tus pies, ¡Glorioso San José! Escucha nuestra oración, Y por tu intercesión, Obtendremos, la paz del corazón; En Nazaret, junto a la Virgen Santa, En Nazaret ¡Glorioso San José! Cuidaste al niño Jesús, Pues por tu gran virtud, Fuiste digno custodio de la luz. Con sencillez humilde carpintero; Con sencillez ¡Glorioso San José! Hiciste bien tu labor, obrero del Señor, Ofreciendo, trabajo y oración. Tuviste fe, en Dios y su promesa; Tuviste fe, ¡Glorioso San José! Maestro de oración, alcanzarnos el don, De escuchar, y seguir la voz de Dios:

ORACIONES A SAN JUAN DE LA CRUZ



ORACIONES A SAN JUAN DE LA CRUZ


ORACIÓN I
Vuestro emblema fue siempre padecer y ser despreciado. ¡Oh, si pudiese yo al menos resignarme en mis tribulaciones, ya que no soy tan generoso como tu en el padecer y ser despreciado! A ti, pues, que en tantos sufrimientos fuisteis siempre paciente, resignado y gozoso, a ti me encomiendo para que me enseñéis a resignarme en mis muchas penas. Tampoco me faltan fuertes pesares y pesadas cruces, y muy a menudo cansado y desalentado me quedo..., me abato..., y caigo. Ten compasión de mí, y ayúdame a llevar con resignación y gozo mis cruces, con la mirada siempre vuelta al cielo. Os tomo por protector mío, por mi maestro y mi guía aquí en la tierra, para ser vuestro compañero en la patria del Paraíso. Amén.

ORACIÓN II
Glorioso Padre nuestro San Juan de la Cruz, a quien el Señor quiso destinar para compartir con la Santa Madre Teresa los trabajos de la insigne Reforma de la Orden del Carmelo, hasta poblar a España de monasterios de descalzos que hicieron célebre vuestro nombre, y venerada vuestra memoria: yo os felicito porque os cupo tan gran dicha, así como por la felicidad de que gozáis en el cielo, en justo premio de tantas y tan grandes virtudes; y os pido, Santo Padre mío, me alcancéis de Dios un gran amor a la Sacratísima Virgen María, que fue el principal distintivo de vuestra gloriosa vida, para que, sirviéndola aquí en la tierra, pueda gozar de ella con Vos en el Cielo. Amén.

ORACIÓN III
¡Glorioso San Juan de la Cruz, verdadero modelo de inocencia y penitencia! yo os felicito por la victoria que alcanzasteis sobre vuestros enemigos y por la gloria, grandeza y poder de que gozáis. Reformador de la Orden Carmelitana, reformad mi alma, llena de miserias, haciendo que conozca lo perecedero de este mundo, para despreciarlo, y lo sólido y constante de la virtud, para amarla. Consejero intimo de Santa Teresa de Jesús, inducid mi espíritu a que constantemente busque y alegremente abrace la perfección cristiana, para que, si un día, preguntado por Dios, que es lo que quiero por mis trabajos, pueda responder, como vos respondisteis: Señor, padecer y ser despreciado por vos. Alcanzadme este santo deseo y la gracia de saberos imitar en la tierra, para después poderos acompañar en el cielo. Amén.


No hay comentarios:

Publicar un comentario